A medio camino entre Jerez y Medina, a pie de autovía se encuentra la Laguna de Medina, la mayor laguna de toda la provincia de Cádiz y la segunda de toda Andalucía.
Perteneciente al municipio jerezano, este paraje tiene gran importancia medio ambiental. Es punto de partida, por un lado, de la Puerta Verde de Jerez, una adaptación de las antiguas vías pecuarias que unen la laguna con el complejo endorreico de Puerto Real, con un recorrido de unos 13 kilómetros y facilitando la visita de varios espacios naturales protegidos.
Por otro lado, desde este punto surgen varios itinerarios ecuestres oficiales, que desembocan en las pedanías jerezanas de Las Pachecas, al noroeste, y Rajamancera, al noreste.
La Laguna de Medina tiene una especial importancia en cuanto a aves acuáticas se refiere y ha sido denominada Zona de Especial Protección para las Aves por la Unión Europea. A lo largo del sendero circular que rodea la laguna encontramos diversos miradores desde los que observar la flora y fauna del entorno. El artículo de la Wikipedia contiene una detallada descripción de la biología de la zona.
Es particularmente reseñable el observatorio habilitado que hay siguiendo el sendero al oeste. Pasarelas de madera dan a un balcón elevado en el que la tranquilidad es total. Un par de bancos permiten al visitante sentarse y disfrutar de la tranquilidad que este oasis proporciona en medio de la campiña jerezana.
Lo cierto es que el lugar merece la pena, tal vez no tanto por su atractivo paisajístico sino por la tranquilidad que ofrece. Para despedirnos, aquí os dejo una foto de un amigo que nos encontramos por los alrededores!